La nitazoxanida, medicamento fundamental en el combate contra parásitos intestinales como los protozoos, causantes de enfermedades como la giardiasis y la criptosporidiosis, se administra para tratar la diarrea relacionada con estos organismos. A través de un régimen dosificado y teniendo en cuenta precauciones específicas, como la evitación del alcohol y la gestión cuidadosa en caso de alergias y otras medicaciones concomitantes, este antiprotozoario actúa inhibiendo el crecimiento y reproducción del patógeno, aunque no está exento de posibles efectos secundarios, generalmente leves, pero en raras ocasiones graves, como reacciones alérgicas severas.
¿Para qué sirve la Nitazoxanida?
La nitazoxanida es un medicamento que se usa para tratar la diarrea causada por algunos tipos de parásitos que se alojan en el intestino. Estos parásitos se llaman protozoos y pueden provocar enfermedades como la giardiasis y la criptosporidiosis. La nitazoxanida pertenece a una clase de medicamentos llamados antiprotozoarios, que actúan deteniendo el crecimiento y la reproducción de los protozoos.
¿Qué es un protozoo y cómo se contagia?
Un protozoo es un organismo microscópico que tiene una sola célula y que puede vivir dentro o fuera de otro ser vivo. Algunos protozoos son beneficiosos para el medio ambiente, pero otros pueden causar infecciones en los humanos y en los animales.
Los protozoos que causan diarrea se transmiten por el agua o los alimentos contaminados con heces de personas o animales infectados. También se pueden contagiar por el contacto directo con una persona o un animal enfermo. Los síntomas de la infección por protozoos pueden incluir:
- Diarrea acuosa o con sangre
- Dolor abdominal
- Náuseas y vómitos
- Fiebre
- Pérdida de peso
- Deshidratación
Estas infecciones pueden ser más graves en las personas con el sistema inmunitario debilitado, como los niños, los ancianos, las mujeres embarazadas y las personas con VIH/SIDA o cáncer.
¿Cómo se usa la nitazoxanida?
La nitazoxanida se presenta en forma de comprimidos o de suspensión líquida para tomar por vía oral. Se recomienda tomarla con la comida cada 12 horas durante 3 días. La dosis depende de la edad y el peso del paciente. Por ejemplo:
- Para los adultos y los niños mayores de 11 años, la dosis es de 500 mg por cada toma.
- Para los niños de 4 a 11 años, la dosis es de 200 mg por cada toma.
- Para los niños de 1 a 3 años, la dosis es de 100 mg por cada toma.
Es importante seguir las instrucciones del médico o del farmacéutico y no tomar más ni menos cantidad del medicamento ni por más tiempo del indicado. También es necesario agitar bien la suspensión antes de cada uso y medir la dosis con una cuchara o un gotero especial.
¿Qué precauciones se deben tener al tomar nitazoxanida?
Antes de tomar nitazoxanida, se debe informar al médico o al farmacéutico si se tiene alergia a este medicamento o a algún otro componente de su fórmula. También se debe informar si se está tomando algún otro medicamento, especialmente anticoagulantes como la warfarina, ya que pueden interactuar con la nitazoxanida y alterar sus efectos.
Además, se debe evitar el consumo de alcohol mientras se toma nitazoxanida, ya que puede aumentar el riesgo de efectos secundarios. Asimismo, se debe beber suficiente agua para prevenir la deshidratación causada por la diarrea.
Si se olvida una dosis, se debe tomar lo antes posible, pero si ya es casi la hora de la siguiente, se debe saltar la dosis olvidada y continuar con el horario normal. No se debe tomar una dosis doble para compensar la olvidada.
¿Qué efectos secundarios puede causar la nitazoxanida?
La nitazoxanida es un medicamento seguro y bien tolerado por la mayoría de los pacientes, pero puede causar algunos efectos secundarios leves y temporales, como:
- Dolor de cabeza
- Dolor estomacal
- Náuseas
- Vómitos
- Cambio en el color de la orina
Estos efectos suelen desaparecer al terminar el tratamiento o al reducir la dosis. Sin embargo, si son muy molestos o persistentes, se debe consultar al médico o al farmacéutico.
En casos muy raros, la nitazoxanida puede causar reacciones alérgicas graves, como:
- Erupción cutánea
- Picazón
- Hinchazón de la cara, la lengua o la garganta
- Dificultad para respirar
Estos síntomas requieren atención médica inmediata, ya que pueden poner en riesgo la vida del paciente. Por eso, se debe suspender el uso de la nitazoxanida y buscar ayuda de emergencia si se presentan.
Bajo la lupa de la medicina, la nitazoxanida se erige como un estandarte en el combate de infecciones parasitarias, como las producidas por protozoos. La ciudadanía, clave en la prevención y manejo responsable de esta afección, necesita ser partícipe de su propio bienestar, estando alerta a síntomas y adheriéndose estrictamente a las indicaciones médicas. La estrategia terapéutica, lejos de ser infranqueable, demanda una cuidadosa observación de sus potenciales efectos secundarios y de las interacciones medicamentosas, para navegar con seguridad en las aguas, a veces turbulentas, de los tratamientos farmacológicos. Unidos, sociedad y medicina, trazarán un camino resiliente hacia la salud integral.