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Nimesulida – Para Qué Sirve

La nimesulida, fármaco antiinflamatorio descubierto en 1985, actúa inhibiendo principalmente la enzima COX-2, reduciendo así inflamación, dolor y fiebre, aunque no está exenta de controversias debido a su potencial toxicidad hepática y otros efectos secundarios, como úlceras y sangrados, vinculados también a su acción sobre la COX-1. Utilizada en diversas afecciones agudas como artritis o dolor menstrual, su uso debe ser cauteloso, evitándose en contextos crónicos o degenerativos y en situaciones específicas de salud, como antecedentes de enfermedades hepáticas o durante el embarazo, requiriendo siempre supervisión médica.

Nimesulida Para Qué Sirve

Contenido de la Página

¿Para qué sirve la nimesulida?

La nimesulida se usa para tratar el dolor y la inflamación aguda, es decir, de corta duración. Algunas de las situaciones en las que se puede usar la nimesulida son las siguientes:

  • Artritis reumatoide: una enfermedad autoinmune que causa inflamación y dolor en las articulaciones.
  • Artrosis: un desgaste del cartílago articular que provoca dolor y rigidez.
  • Dolor menstrual: el dolor que se produce en el abdomen bajo durante la menstruación.
  • Desórdenes ginecológicos: como quistes ováricos, endometriosis o miomas uterinos, que pueden causar dolor pélvico.
  • Esguinces, torceduras y fracturas: lesiones traumáticas que afectan a los ligamentos, músculos o huesos.
  • Bursitis: una inflamación de las bolsas sinoviales que facilitan el movimiento de las articulaciones.
  • Intervenciones quirúrgicas: como extracciones dentales, cirugías ortopédicas o abdominales, que pueden generar dolor postoperatorio.
  • Dolor dental: causado por caries, infecciones o traumatismos en los dientes o las encías.

La nimesulida no se debe usar para tratar enfermedades crónicas o degenerativas, como el cáncer, la diabetes o el Alzheimer. Tampoco se debe usar para tratar infecciones bacterianas o virales, como el COVID-19, ya que no tiene efecto antibiótico ni antiviral.

¿Qué es la nimesulida y cómo actúa?

La nimesulida es un fármaco que se descubrió en 1985 y que se comercializa en varios países del mundo, aunque en algunos está prohibido por su potencial toxicidad hepática. La nimesulida actúa inhibiendo una enzima llamada COX-2, que es la responsable de producir unas sustancias llamadas prostaglandinas, que intervienen en los procesos inflamatorios, dolorosos y febriles. Al bloquear la COX-2, la nimesulida reduce la inflamación, el dolor y la fiebre.

Sin embargo, la nimesulida no solo inhibe la COX-2, sino que también tiene un efecto sobre otra enzima llamada COX-1, que tiene funciones protectoras en el estómago y en la coagulación de la sangre. Por eso, la nimesulida puede causar efectos secundarios como úlceras gástricas o sangrados. No obstante, la nimesulida es más selectiva para la COX-2 que para la COX-1, lo que significa que tiene menos riesgo de causar estos efectos secundarios que otros AINE más tradicionales.

¿Cómo se debe tomar la nimesulida?

La nimesulida se puede encontrar en diferentes presentaciones, como tabletas, gotas o sobres. La dosis recomendada es de 100 mg cada 12 horas, aunque puede variar según el criterio médico. La nimesulida se debe tomar preferiblemente con las comidas o con un vaso de agua para evitar irritar el estómago. No se debe exceder la dosis máxima diaria de 200 mg ni el tiempo máximo de tratamiento de 15 días.

La siguiente tabla resume las formas de tomar la nimesulida según su presentación:

Presentación Dosis Forma de uso
Tabletas 100 mg Tomar una tableta cada 12 horas con las comidas o con agua
Gotas 50 mg/ml Tomar 40 gotas (2 ml) cada 12 horas con las comidas o con agua
Sobres 100 mg Disolver el contenido de un sobre en un vaso de agua y tomar cada 12 horas con las comidas

¿Qué efectos secundarios puede tener la nimesulida?

La nimesulida puede causar efectos secundarios en algunas personas, especialmente si se usa de forma prolongada o a dosis altas. Los efectos secundarios más frecuentes son los siguientes:

  • Dolor de estómago, náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento.
  • Dolor de cabeza, mareos, somnolencia o insomnio.
  • Erupciones cutáneas, picazón, urticaria o alergia.
  • Aumento de la presión arterial, palpitaciones o taquicardia.
  • Alteraciones en los análisis de sangre, como anemia, leucopenia o trombocitopenia.

Los efectos secundarios más graves son los que afectan al hígado, como la hepatitis o la insuficiencia hepática. Estos efectos son raros, pero pueden ser fatales. Por eso, se debe suspender la nimesulida y consultar al médico si se presentan síntomas como:

  • Ictericia: coloración amarillenta de la piel y los ojos.
  • Coluria: orina oscura o con sangre.
  • Acolia: heces claras o blancas.
  • Prurito: picazón intensa en todo el cuerpo.
  • Dolor abdominal: localizado en el cuadrante superior derecho.

La nimesulida puede causar daño hepático grave e irreversible. Si tienes algún síntoma de hepatitis, deja de tomar el medicamento y acude al médico de inmediato.

¿Qué precauciones se deben tener al usar la nimesulida?

La nimesulida no es un medicamento que se pueda tomar sin supervisión médica. Antes de usarla, se debe consultar al médico si se tiene alguna de las siguientes condiciones:

  • Alergia a la nimesulida o a otros AINE.
  • Antecedentes de úlcera gástrica, sangrado digestivo o enfermedad inflamatoria intestinal.
  • Antecedentes de enfermedad hepática, renal o cardíaca.
  • Embarazo, lactancia o planificación familiar.
  • Uso de otros medicamentos que puedan interactuar con la nimesulida, como anticoagulantes, antihipertensivos, antidiabéticos o antidepresivos.

La nimesulida no se debe administrar a niños menores de 12 años ni a adultos mayores de 65 años, ya que tienen mayor riesgo de sufrir efectos secundarios. Tampoco se debe conducir ni operar maquinaria pesada mientras se toma la nimesulida, ya que puede alterar la capacidad de reacción.

La nimesulida es un medicamento que puede ayudar a aliviar el dolor y la inflamación, pero que también puede tener efectos secundarios graves, especialmente en el hígado. Por eso, se debe usar con precaución y bajo supervisión médica. Antes de tomar la nimesulida, se debe consultar al médico si se tiene alguna condición que pueda aumentar el riesgo de complicaciones. Además, se debe seguir la dosis y el tiempo de tratamiento indicados por el médico. La nimesulida no es un medicamento para todos, y se debe estar atento a cualquier síntoma de intolerancia o toxicidad.

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