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Nifedipino – Para Qué Sirve

El nifedipino, medicamento perteneciente a los bloqueadores de los canales de calcio, se destaca por su habilidad para relajar los vasos sanguíneos y disminuir el ritmo y fuerza de las contracciones cardiacas, siendo esencial para tratar a pacientes con presión arterial alta y angina. Presentado en cápsulas o tabletas de liberación prolongada, es imprescindible su administración consciente y conforme a las indicaciones médicas, atendiendo a posibles efectos secundarios y precauciones relacionadas con interacciones medicamentosas y condiciones de salud del paciente. Su uso incorrecto o irresponsable puede conllevar serios riesgos para la salud, destacando la importancia de la rigurosa observación médica.

Nifedipino Para Qué Sirve

Contenido de la Página

¿Qué es el nifedipino y cómo actúa?

El nifedipino es un medicamento que pertenece a un grupo de fármacos llamados bloqueadores de los canales de calcio. Estos fármacos actúan bloqueando el paso de iones de calcio a través de unas estructuras llamadas canales de calcio, que se encuentran en las células del corazón y de los vasos sanguíneos. Al bloquear estos canales, el nifedipino consigue dos efectos principales:

  • Relajar los vasos sanguíneos, lo que hace que se dilaten y disminuya la resistencia al flujo de la sangre. Esto baja la presión arterial y mejora el riego sanguíneo a los órganos, especialmente al corazón.
  • Disminuir el ritmo y la fuerza de las contracciones del corazón, lo que reduce el consumo de oxígeno y previene el daño al músculo cardíaco.

Estos efectos son beneficiosos para las personas que sufren de presión arterial alta y angina, ya que alivian los síntomas y previenen complicaciones como infartos, insuficiencia cardíaca, accidentes cerebrovasculares o daño renal.

¿Cómo se debe tomar el nifedipino?

El nifedipino se presenta en forma de cápsulas o tabletas de liberación prolongada, es decir, que liberan el medicamento de forma gradual durante varias horas. La dosis y la frecuencia de administración dependen de la condición que se esté tratando y de la respuesta individual de cada paciente. Por lo general, se recomienda tomar el nifedipino una vez al día, con el estómago vacío, una hora antes o dos horas después de las comidas. Las cápsulas o tabletas deben tragarse enteras, sin partir, masticar ni triturar, con ayuda de un poco de líquido.

Es importante seguir las instrucciones del médico o del farmacéutico al tomar el nifedipino, y no modificar la dosis ni la duración del tratamiento sin consultar previamente. El nifedipino es un medicamento que controla la presión arterial alta y la angina, pero no los cura. Por eso, se debe tomar de forma regular, aunque se sienta bien. Si se olvida una dosis, se debe tomar lo antes posible, siempre que no sea casi la hora de la siguiente. No se debe tomar una dosis doble para compensar la olvidada.

¿Qué precauciones hay que tener en cuenta al tomar nifedipino?

El nifedipino es un medicamento seguro y eficaz cuando se usa correctamente, pero como todos los medicamentos puede tener efectos secundarios o interacciones con otros fármacos o alimentos. Algunas precauciones que hay que tener en cuenta al tomar nifedipino son las siguientes:

  • Antes de empezar a tomar nifedipino, se debe informar al médico o al farmacéutico si se tiene alergia a este medicamento o a otros bloqueadores de los canales de calcio, o si se padece alguna enfermedad del hígado, del riñón, del corazón o de los vasos sanguíneos.
  • El nifedipino puede causar mareos o somnolencia, por lo que se debe evitar conducir o manejar maquinaria peligrosa hasta comprobar cómo afecta este medicamento.
  • El nifedipino puede interactuar con otros medicamentos que también afectan a la presión arterial o al ritmo cardíaco, como diuréticos, betabloqueantes, inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, antagonistas de los receptores de angiotensina II, otros bloqueadores de los canales de calcio, bloqueantes alfa-adrenérgicos, inhibidores de la fosfodiesterasa 5, alfa-metildopa o digoxina.

    También puede interactuar con medicamentos que afectan al metabolismo del nifedipino, como eritromicina, ritonavir, ketoconazol, fluoxetina, nefazodona, quinupristina/dalfopristina, ácido valproico, cimetidina, fenobarbital, carbamazepina, fenitoína o rifampicina. Por eso, se debe informar al médico o al farmacéutico de todos los medicamentos que se estén tomando, incluyendo los que se venden sin receta o los que se usan de forma ocasional.

  • El nifedipino puede interactuar con algunos alimentos o bebidas que pueden alterar su absorción o su efecto. Por ejemplo, el zumo de pomelo puede aumentar la concentración de nifedipino en la sangre y potenciar sus efectos. Por eso, se debe evitar tomar zumo de pomelo o comer pomelos mientras se esté tomando nifedipino.
  • El nifedipino no se debe usar durante el embarazo ni la lactancia, a menos que el médico lo considere necesario y beneficioso para la madre y el bebé. Se debe consultar al médico si se está embarazada o se planea estarlo, o si se está dando el pecho a un bebé.
  • El nifedipino no se recomienda en niños y adolescentes menores de 18 años, ya que no hay suficiente evidencia sobre su seguridad y eficacia en este grupo de edad.

¿Qué efectos secundarios puede tener el nifedipino?

El nifedipino es un medicamento bien tolerado por la mayoría de las personas que lo toman, pero puede causar algunos efectos secundarios que suelen ser leves y transitorios. Los efectos secundarios más frecuentes son:

  • Dolor de cabeza
  • Enrojecimiento o calor en la cara
  • Hinchazón de tobillos o piernas
  • Palpitaciones o taquicardia
  • Mareos o sensación de inestabilidad
  • Náuseas o malestar estomacal
  • Estreñimiento o diarrea

Estos efectos secundarios suelen desaparecer al cabo de unos días o semanas de tomar el medicamento. Si son muy molestos o persistentes, se debe consultar al médico o al farmacéutico para ajustar la dosis o cambiar el medicamento.

En raras ocasiones, el nifedipino puede causar efectos secundarios graves que requieren atención médica urgente. Algunos de estos efectos son:

  • Reacción alérgica, con síntomas como erupción cutánea, picor, hinchazón de la cara o la garganta, dificultad para respirar o shock anafiláctico.
  • Hipotensión severa, con síntomas como debilidad, mareos extremos, desmayos o visión borrosa.
  • Angina inestable o infarto de miocardio, con síntomas como dolor opresivo en el pecho que se irradia al brazo izquierdo o al cuello, sudoración fría, palidez o dificultad para respirar.
  • Insuficiencia cardíaca congestiva, con síntomas como hinchazón de pies o manos, aumento de peso repentino, falta de aire al acostarse o al hacer esfuerzos, tos con expectoración rosada o espumosa.
  • Hemorragia gastrointestinal, con síntomas como vómitos con sangre o aspecto de posos de café, heces negras o alquitranadas, dolor abdominal intenso.
  • Ictericia o hepatitis, con síntomas como coloración amarillenta de la piel o los ojos, orina oscura, heces claras, pérdida de apetito, náuseas, vómitos o dolor en el lado derecho del abdomen.

Si se presenta alguno de estos efectos secundarios graves, se debe suspender el medicamento y acudir al médico lo antes posible.

El nifedipino es un medicamento que puede mejorar la calidad de vida de las personas que sufren de presión arterial alta y angina, al relajar los vasos sanguíneos y proteger el corazón. Sin embargo, como todo medicamento, tiene sus efectos secundarios y sus precauciones, que deben ser conocidos y respetados por los pacientes y los profesionales de la salud. Por eso, es importante seguir las indicaciones del médico o del farmacéutico al tomar el nifedipino, y consultar cualquier duda o problema que se presente. Así se podrá aprovechar al máximo los beneficios de este fármaco y evitar o minimizar los riesgos. Recuerda que tu salud es lo primero, y que el nifedipino es un aliado para cuidarla.

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