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En estado Trujillo, un día martes 23 de junio de 1772, nació José Cristóbal Hurtado de Mendoza y Montilla mejor conocido como Cristóbal Mendoza, hijo de Luis Bernardo Hurtado de Mendoza y Gertrudis Eulalia Montilla. Este célebre político venezolano inició sus estudios en su ciudad natal. A los 16 años se dirigió a capital del país para dar inicio a sus estudios de Filosofía la Universidad de Caracas. Seguidamente obtuvo el título de Doctor en Derecho Civil y Canónico en la Universidad Santo Tomás de Aquino en Santo Domingo, en el año 1797. Aunado a esto, tras 3 años de preparación, Mendoza obtuvo el título de Abogado otorgado por la Real Audiencia de Caracas, desde ahí ejerció su profesión en distintas poblaciones del país.
Luego de haber recibido su título de abogado se mudó a Barinas para ejercer su profesión, lugar donde contrajo matrimonio con Juana Briceño Méndez Mendoza, de quien enviudó en el año 1803. Mientras desempeñaba el cargo de protector de los venezolanos naturales de Barinas, cuyo territorio comprendía también (en la época) el estado Apure, se dedicó a defender a los indígenas desvalidos.
A inicios del siglo XIX, luego de haber enviudado contrajo nupcias con María Regina Montilla del Pumar, quien era familia de José Ignacio del Pumar, marqués de Boconó y de las Riberas del Masparro, en ese mismo año enviudó por segunda vez. El 19 de abril de 1810 se sumó a los caraqueños que emprendieron el movimiento independentista. Ese mismo año, organizó en la provincia llanera una Junta de Gobierno local en donde lanzo su proclama: “Paz y tranquilidad son nuestros deseos. Morir o ser libres nuestra divisa“.
Poco después fue elegido diputado para representar a Barinas en el Congreso Constituyente de 1811, cargo que no pudo ejercer, ya que el mismo Congreso lo designó a la cabeza del Triunvirato Ejecutivo (forma de gobierno ejercido por tres personas alíadas entre sí) que ejercía para la época el gobierno del país, convirtiéndolo en el primer presidente de una Venezuela que aún no se encontraba constituida en un Estado soberano. Junto a él, Juan de Escalona y Baltasar Padrón conformaban el Triunvirato y se turnaban semanalmente para ejercer la presidencia (este Triunvirato fue el primero en crearse en Venezuela y se mantuvo en el país desde el 6 de marzo de 1811 hasta el 21 de marzo de 1812).
El 14 de agosto de 1811 se casó por tercera vez con Gertrudis Buroz Tovar y en diciembre del mismo año promulgó la primera Constitución de Venezuela.
A la Caída de la Primera República, al igual que muchos próceres, se vio obligado a emigrar y refugiarse en Nueva Granada (actualmente República de Colombia) en el año 1812. Estando en territorio colombiano, recibió noticias de que, el entonces brigadier, Simón Bolívar se disponía a libertar a Venezuela, al escuchar de su causa se unió a el y no se separó de su lado hasta lograr su causa independentista. Luego de la victoriosa Campaña Admirable el Libertador nombró a Mendoza Gobernador de Mérida; y casi inmediatamente fue nombrado Gobernador Político de Caracas.
Fue Mendoza quien propuso al Cabildo Abierto celebrado en Caracas, en 1813, que se le confiriera a Simón Bolívar el titulo de Libertador, ya que sentía gran admiración por el logro obtenido por el Padre de la Patria. A partir de 1821, ejerció el cargo de Ministro de la Corte de Justicia, por un lapso de cinco años.
En el año 1826 inició la edición de la primera gran obra histórica de la vida de Bolívar titulada “Colección de documentos relativos a la vida pública del Libertador de Colombia y del Perú, Simón Bolívar“.
Durante el año de 1826, en tiempos de la Gran Colombia, Mendoza es nombrado Intendente del Departamento de Venezuela por el Vicepresidente Francisco de Paula Santander, tiene que enfrentar el movimiento separatista de La Cosiata, liderizado en Valencia por José Antonio Páez. En la Asamblea celebrada en Caracas, se opone a los enemigos de Bolívar y a los que proponen la disolución de la Gran Colombia. Pero pronto las intrigas en su contra y una grave enfermedad, le hacen apartarse de la vida pública.
A mediados de 1828 renunció a su cargo de intendente y murió en una hacienda en las afueras de Caracas el 8 de febrero de 1829, a los 56 años. Para ese entonces los logros que había alcanzado dieron a Bolívar razones para llamarlo “modelo de virtud y bondad útil“.